NICARAGUA
El territorio de Nicaragua fue
explorado entre los años 1519 y 1523 y luego se formó en provincias teniendo
como sede la capitanía general de Guatemala.
En 1821 se independizo de
España y tres años después entro a formar parte de la confederación de
Repúblicas de América Central.
En 1839 se constituyó en un
estado independiente.
El istmo de Rivas, en época de
la conquista fue la tierra del astuto cacique Nicaragua de las tribus de
Nicarao. De igual manera como el presente, Rivas fue importante corredor de tránsito
en la colonización del país, como fue puente para las antiguas migraciones de
grupos paleo indios y tribus precolombina que se asentaron en ese territorio.
Durante la colonia la región
fue denominada como “Valle de Nicaragua “hasta que unos de sus principales
pueblos fue elevado a rango de ciudad, en 1720, con el nombre de la “Villa de
la Pura y Limpia Concepción de Rivas” nombre que le pusieron en honor al
capitán General Francisco Rodríguez de Rivas, presidente de audiencia y
capitanía general de Guatemala, en aquel entonces.
SAN JUAN DEL SUR
San Juan del Sur era un puerto
pesquero, pequeño y tranquilo.
Hoy es el principal destino
turístico de la costa Pacífico de Nicaragua. Está ubicado en el departamento de
Rivas, a 141 kilómetros de la capital Managua. Tiene una extensión territorial
de 411 kilómetros cuadrados. El clima de San Juan del Sur es de sabana tropical
y su temperatura promedio es de 27 grados centígrados. San Juan del Sur cuenta
con los servicios públicos de ENERGIA ELECTRICA, AGUA POTABLE, TRANSPORTE,
INTERNET, TELEFONO Y TELEVISION POR CABLE. También se encuentra una oficina de
Correos, una biblioteca y bancos, a pesar de que en San Juan del Sur predomina
la religión católica, solo hay una parroquia municipal y varias iglesias
evangélicas.
El municipio tiene una
extensión territorial de 415.96 km, 15 Barrios y 33 comunidades.
Los límites municipales son
los siguientes:
Al noroeste:
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Municipio de Tola
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Al norte y noreste:
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Municipio de RivasMunicipio de Cárdenas
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Al sureste:
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Costa Rica
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Al suroeste:
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Océano Pacífico
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Plumilla Original de San Juan
del Sur1855
La ciudad fue descubierta por
el piloto de la casa real Andrés Niño en el verano de 1522 durante su recorrido
en busca del estrecho dudoso entre los océanos Atlánticos y Pacifico, dicha
expedición estaba comandada por el conquistador GIL GONZALES DAVILA, llegando al
Golfo de San Lucas, a la altura de Nicoya, hoy Costa Rica. Allí acordaron
separarse y Andrés siguió por Mar llegando así a Nicaragua en donde logra
observar tierra en la pequeña aldea de San Juan de la Mar del Sur como era
conocida en esos días, aquí se concentraba poca población indígena, pero si
contaba con muchas tribus pero estas se concentraron en otros territorios.
Luego zarpa hacia el norte en
donde descubre el golfo que denomino Fonseca, muere en 1525 subiendo el río
Ulúa internándose en la provincia de San Miguel actualmente el Salvador.
San Juan del Sur, fue
habilitado provisionalmente como puerto Nicaragüense, por decreto constituyente
de la Federación Centroamericana en el año 1827, en 1830 fue habilitado
definitivamente como puerto Marítimo por decreto ejecutivo del 8 de febrero del
mismo año con el nombre de “Puerto de la Independencia”. por ley de la Asamblea
Legislativa, emitida en la ciudad de Chinandega el 18 de septiembre del año
1840, se le confirió al puerto plenitud definitiva de importaciones y
exportaciones, bajo un nuevo nombre de “San Juan de la Concordia”, el 12 de
Noviembre de 1851, por Ley Legislativa se le declaro como puerto Mayor. A
principios de 1852, se le dio al puerto como a la ciudad el nombre de “Ciudad
Pineda” en honor al ex jefe de estado, originario de la Ciudad de Rivas,
Licenciado Laureano Pineda.
LA RUTA DEL TRANSITO
Sucesos trascendentales para
la emigración durante el siglo XIX, fue la ruta del tránsito.
Se aprovecho la ruta de
Nicaragua por que era fácil para transitar tanto por agua como por tierra y así
que para 1851 usaron esta ruta por el istmo de Rivas.
Con el descubrimiento del oro
en California, se desata en Norte América una fiebre por trasladarse al Océano
Pacifico, en busca del preciado metal, a esto se le denomino la ¨fiebre del
Oro¨, y para cumplir su sueño buscaban a todo trance la manera de llegar a
California.
Una parte lo hacían por el
territorio Norteamericano que en esa época estaba plagado de muchos peligros,
principalmente los indios píeles rojas, otros lo hacían por agua saliendo de
New York o Nueva Orleans por el istmo de Panamá y otros a dar la vuelta por el
cabo de Hornos o tierra de fuego.
Como era tanta la demanda para
dirigirse a California, varias compañías competían buscando rutas alternas con
mejores condiciones y más asequible.
Comodoro Cornelius Vandervilt
El comodoro Cornelius
Vandervilt el segundo hombre más rico de los EE UU quien poseía grandes
negocios navieros, se propone en conseguir un contrato con Nicaragua para hacer
un canal interoceánico o una ruta alterna. Para conseguir esto se vale de sus
relaciones sociales y políticas, para lograr el contrato que es firmado en
Nicaragua, en agosto de 1849, entre el coronel DAVID WHITE que era
representante de la compañía de Cornelius Vandervilt y el Gobierno
Nicaragüense, encabezado por el Director Supremo Norberto Ramírez, comenzando
los trabajos de trazados y limpieza de la Ruta.
San Juan del Sur fue declarado
puerto terminal en el Océano Pacifico de la Ruta del Tránsito, fue elevado al
rango de Ciudad en 1851.
Los pasajeros iban de Nueva
York y de Nueva Orleans hasta San Juan del Norte, puerto de Nicaragua en el
Atlántico; allí tomaban vaporcitos fluviales que los remontaban las 120 millas
del Río San Juan hasta el puerto de San Carlos, en la ribera oriental del lago
de Nicaragua. Luego en vapores medianos cruzaban las 55 millas que desde ahí
hay hasta la bahía de la Virgen, en ribera occidental del mismo lago.
La etapa final del cruce de
Nicaragua se hacía en mula o a pie sobre un camino de 12 millas construido por
la compañía, que llevaba desde la Virgen al puerto de San Juan del Sur, en el
pacifico, en donde vapores de gran calado, del mismo Vanderbilt, esperaban a
los pasajeros para llevarlos a San Francisco.
En un principio ese camino era
un fangal pedregoso y áspero, en el que a veces los peatones y hasta las mulas
se atollaban. Con el tiempo se hicieron mejoras y llego el día que algunos
pocos dichosos pasajeros pudieron hacer el viaje en diligencia tiradas por mulas
o bueyes. El precio de dicha travesía, para los pasajeros de California eran
veinticinco dólares de Punta Arenas a San Juan del Sur, incluyendo el valor de
la mula entre La Virgen y San Juan del Sur.
Las primeras diligencias que
se conocieron en la ruta del tránsito fueron de la propiedad de un ciudadano
Alemán llamado Enrique Gottel que vio la manera de tener un buen negocio del
Puerto de La Virgen hasta San Juan del Sur. Cada viajero pagaría 15 centavos
por libra de equipaje, además del alquiler de un buen caballo de silla.
Enrique Gottel
Quienes utilizaban la Ruta del
Tránsito viajaban por tierra en mula por un camino muy malo, pasando por
grandes incomodidades pero ya macadamizado fue más fácil, así que se trasladó a
Rivas donde en 1852 firmó un contrato con la Compañía de Tránsito.
En él se comprometía a
proporcionar caballos para el transporte de equipajes y viajeros, entraron en
servicios confortables diligencias, estaban pintadas (inicialmente) de azul y
blanco y las tiraban cuatro mulas. Los vehículos salían en caravanas de
veinticinco y llegaron a contar con una flota de 75 diligencias, trasportando a
casi 800 personas por día.
San Juan del Sur era un sitio
desolado, que apenas tenía dos o tres casas y chozas de muy inferior calidad,
en las aguas de la Bahía se observaban los cayucos y botes de madera, en donde
los nativos del lugar pescaban para su sobrevivencia, pero la gran marea de
emigración pasando a través del puerto, pronto lo coloco en el segundo puerto
más importante de América, siguiéndole a Acapulco en la Costa Mexicana.
La compañía accesoria del
Transito aceleró su crecimiento con la construcción de una estación para carga
y pasajeros y el nombramiento de un cónsul Americano residente, con el
conocimiento del hecho que madera, agua, carbón y unos pocos víveres, podían
ser comprados aquí, esto motivo a que otras embarcaciones anclaran en sus aguas
para surtirse un poco de lo necesario para su viaje.
La costa es arenosa, y se
extiende entre dos promontorios rocosos que forman los extremos Norte y Sur de
los límites de la bahía.
El terreno se levanta
gradualmente de la Costa hacia el este y esta tupido de árboles forestales que
están llenos de bejucos y entre lazada maleza. A la llegada de un vapor de
California a San Juan del Sur, hace que este pintoresco puerto ponga en
movimientos a dos o trescientos nativos, que desde los arbustos y matorrales
salían muy ansiosos por ganar unos cuantos dólares por transportar a los pasajeros
a lomo de mulas hacia la bahía de la Virgen. El camino selvático entre estos
dos lugares, San Juan del Sur y la Virgen, era agradable y pintoresco.
Para ese entonces no había
desembarcaderos o muelle en San Juan del Sur, los vapores anclaban a una milla
o menos de la costa, sus pasajeros desembarcaban utilizando los botes propiedad
de los nativos, por uno o dos dólares eran llevados a la costa en donde los
esperaban más nativos en estado de semi-desnudez, que por otros 25 centavos,
eran llevados en hombros a cada pasajero a través del agua para “botarlo” en
tierra firme.
En San Juan del Sur existía
una casa grande de dos pisos, con una bodega, oficinas, sala y dormitorios para
el agente, arriba; una caseta de zinc que se usaba de bodega; un pozo con su
bomba y tanque de hierro para proveer de agua a los vapores; un tanque flotante
de agua para el mismo fin; un depósito de carbón con una pequeña bodega, y un
casco hundido que servía de embarcadero a las lanchas, en la bodega había
quinientas toneladas de carbón cerca del casco viejo del Damascos. Y doscientas
treinta cinco toneladas en la costa.
El camino del tránsito entre
La Virgen y San Juan del Sur estaba recubierto de macadam y tenía todos los
puentes ya construidos. Cerca del punto más alto de la ruta estaba la casa del
medio camino, del superintendente de la ruta, donde había un puesto de descanso
con establos para las bestias y un lugar para guardar los carretones.
Para ese entonces Granada era
la Capital de Nicaragua, aquí se nombraban las diferentes representaciones
diplomáticas y San Juan del Sur siendo un puerto importante se nombraban los
Consulados Diplomáticos de los diferentes países hermanos de la época.
Desde la independencia,
Nicaragua se vio envuelta en un período de guerras civiles que debilitaron la
formación de una estructura centralizada estatal. En la ciudad de León
dominaban los Liberales o Demócratas: un grupo de terratenientes ilustrados,
agricultores y comerciantes, apoyados por grupos indígenas y sectores
empobrecidos. En Granada el dominio lo tenían los Conservadores o Legitimistas:
comerciantes granadinos y hacendados señoriales, respaldados por el clero mayor
y la aristocracia colonial.
Para afirmar el dominio del
aparato estatal, cada una de las dos ciudades reclamaba el derecho a ser la
capital.
Los Filibusteros en San Juan
del Sur
El 15 de agosto de 1854 arriba
a San Juan del Sur el amigo y socio de William Walker, Byron Cole este viajaba
en un vapor de la compañía de transito y el motivo de su visita era ver si se
podía hacer dinamismo norteamericano en Nicaragua, viajaba en el mismo vapor su
paisano William Wells, estando de regreso en Nicaragua Castellón firma un
contrato con el Filibustero Byron Cole en virtud de las cuales este traería un
contingente de Americanos para dar un golpe de estado al Presidente Frutos
Chamorro, en dicho contrato Castellón se compromete a pagar un sueldo mensual
de 100 dólares y donación de dos caballería de tierras si el objetivo era
logrado.
Cole se embarco hacia
California a sentarse con Walker para ofrecer dicho contrato ya que este tenía
mucha experiencia en servicios militares, Walker lo mando de regreso a
Nicaragua para que se hiciera otro contrato y corregir unas palabras, para que
el Gobierno de EE.UU no retrasara sus planes, dicho contrato tenía que decir”
que llevarían Colonizadores a Nicaragua” inmediatamente regresa a California en
donde Walker lo esperaba con el nuevo contrato.
Walker contrata un pequeño
vapor en que trasladarse llamado ”Vesta” en donde surcaron el mar llegando al
realejo el 16 de Junio de 1855 desembarcando con sus 58 Filibusteros Americanos
al que llamaron ” Falange Americana”.
William Walker recibió una
orden del Gobierno Liberal de León para preparar una expedición contra el
ejercito de los Conservadores en la ciudad de Rivas, y el 23 de Junio se
dirigió al Realejo con la Falange Americana y con 150 nativos al mando del
Coronel Ramírez; ahí abordo el Vesta y zarpo en dirección a San Juan del Sur,
al anochecer del 27 de Junio de 1854, desembarco en gigante a escasas leguas de
Brito y a pesar de la oscuridad y del fuerte aguacero que caía, inicio su
marcha hacia Tola guiado por Don Máximo Espinoza. En la mañana del 28 llego
Walker a una casa abandonada en los terrenos de Brito, en donde paso con su
gente todo ese día, porque su propósito era encaminarse hacia Rivas, por la
noche con el objetivo de atacar la plaza al amanecer del día 29.
De la casa en donde pasaron el
día los filibusteros salieron al anochecer, y antes de llegar a Tola comenzó a
llover copiosamente.
Como a la una de la mañana, el
Gobernador militar don Eduardo Castillo hizo salir a don Dolores Bendaña con
rumbo a San Juan del Sur a dar orden al Coronel Manuel Arguello quien era el
jefe militar a que se concentrare a la plaza con los 75 hombres que mandaba,
previniéndole que lo hiciera con la presteza que el caso lo requiriere.
Mientras así se procedía en
Rivas, los pueblos del departamento al oír los tres cañonazos se preparaban
para marchar a la cabecera.
Walker salió de Tola en la
mañana de ese mismo día con dirección a Rivas Ciudad de más de 15 mil almas
situada a más de 25 millas de distancia, haciendo un alto al llegar a la
ciudad, llamo a sus oficiales para explicarles su plan de ataque, el cual fue
así: sus mejores jefes debían de rechazar al enemigo de las calles, haciendo
avanzar a los americanos a pasos de carga hasta la plaza, los americanos y los
nativos nicaragüense marcharon tal como se le había ordenado y tan pronto
bajaron al punto llamado el cerrito como a 5oo varas de la entrada de la
Ciudad, fueron vistos por una escuadra de conservadores que al mando del
oficial Manuel Marenco estaba de avanzada en la calle que ronda la población.
Los filibusteros que también
vieron a los nuestros se lanzaron aceleradamente sobre ellos; se hicieron dos
descargas por cada parte, quedando una mula muerta perteneciente a los
Americanos, los Nicaragüenses se concentraron en la plaza y los Americanos los
cargaron con vigor hasta ocupar la casa hacienda de “Santa Úrsula”
Fue así como el Coronel del
Bosque tuvo la feliz pero peligrosa idea de poner fuego a la casa, y al efecto
busco, entre la tropa, un voluntario que quisiera exponer su vida en tan
arriesgada comisión, en donde si lo lograban este seria remunerado con la
cantidad de 50 pesos de premio, un cívico y un joven Maestro de 35 años de edad
llamado Emmanuel Jeremías Mongalo y Rubio oye la propuesta del jefe, y
comprendiendo el alcance del pensamiento, corre presurosamente a ponerse a su
orden “si muero no importa mis alumnos recordaran que su maestro murió
dignamente por defensa de la Patria” estas fueron las palabras del maestro que
quitándose su camisa colocándola sobre una rama haciendo así una tea encendida
que esquivándose las balas logro llevar a cabo dicha misión, obligando a Walker
a desocupar la casa, Mongalo rehusó los 25 pesos y paso a la historia como
Héroe Nacional mientras que su compañero acepto el dinero, el cual desapareció
en el olvido.
Al momento de dar la orden de
desalojar la casa, Walker solamente contaba con 35 hombres aptos para combatir;
los demás estaban muertos o heridos, y de los cuales podían caminar, se
preparaban para la huida, y ya listos se lanzaron fuera de la casa como fieras
por los cazadores, tomando por dentro de las haciendas con dirección a San
Jorge en busca del camino de la Virgen para llegar a la ruta del tránsito y
encaminarse hacia San Juan del Sur, a donde con paso lento y arrastrando los
rifles llegaron a la seis de la tarde del día 30 de Junio.
Al día siguiente prosiguieron
en retirada a San Juan del Sur, en donde el barro del sendero dificultaba la
caminada de la tropa, hasta divisar la blanca carretera del tránsito, minutos
después de estar caminando hacia el puerto Walker escucho un sonido a lo lejos
y hacia delante que era el murmullo de la recua de las mulas que conducían a
los pasajeros de San Juan del Sur a la Virgen, Walker tenía miedo de ser
contraatacado por los Legitimista y esto hacia que cualquier bulla de los
árboles o de los animales pusieran a temblar a los filibusteros, cerca de la
Casa del Medio camino se vio venir en un caballo a un individuo llamado Dewey
originario de California acercándose a Walker le dijo que venía de San Juan del
Sur y que no había llegado ningún Legitimista desde la salida de Arguello hacia
Rivas la madrugada del 29 de Junio.
Poco después de la puesta del
sol, los vecinos de San Juan del Sur los vieron desfilar por las calles
polvorientas del pueblo y se alojaron en el cuartel situado cerca de la playa,
su tropa presentaba un aspecto lamentable; muchos de ellos sin sombreros,
descalzos y con ropa hecha jirones; cubiertos de sangres resecas, condenados a
causas de las heridas, algunos otros con los brazos con cabestrillos
improvisados, que solamente se le puede ver después de haber perdido una
batalla, Walker ordeno apoderase de los botecitos del puerto y de tenerlos
custodiados allí.
Esperaban encontrar al
bergantín Vesta, pues se le había ordenado surcar rodando la bahía hasta que se
supiera el resultado de la batalla. Al no tener noticias del Velero, Walker se
apodero de bergantín costarricense San José, en el que embarco a su gente y
zarpo en busca de Vesta.
En esa noche, mientras Walker
y sus hombres descansaban y recuperaban fuerzas a bordo del barco San José, en
aguas de la bahía de San Juan del Sur, repentinamente estallo en llamas el
cuartel del Pueblo; el resplandor del incendio enrojecía el cielo, reflejándose
en el agitado oleaje del Mar. Walker y unos de sus oficiales se hallaban
sentados en el Alcázar del barco al momento de descubrirse las llamas.
Inmediatamente se destaco a un
oficial para establecer la causa y se averiguo que SAM, un marinero y Dewey,
proscrito de la justicia Californiana y de otras, por criminal, habían iniciado
el fuego en la población con el propósito de robar, sabiendo que la culpa
recaería sobre Walker y sus hombres, alejando las sospechas de los verdaderos
incendiarios. El marinero era Dueño de una lancha utilizada para el tráfico de cabotaje
y que estaba sujeta a la pompa del San José, esta sirvió de transporte para la
búsqueda de los causantes del incendio. Tras indagar los hechos Walker aplico
juicio sumario al estilo Americano condenándolos a muerte, SAM logro huir, pero
Dewey no pudo: su cuerpo fue atravesado a balas en la costa del puerto, luego
fue colocado en un saco de lona con un cartel que decía el delito y después lo
arrojaron al mar, por la tarde de ese mismo día Walker se alejo de San Juan del
Sur rumbo al Realejo en donde se encontraron al barco Bergantín Vesta propiedad
de los filibusteros, este al divisar al San José con Bandera Costarricense
busco la manera de huir no dándose cuenta que abordo se encontraba Walker.
Dos meses después San Juan del
Sur es escenario del regreso y desembarco de los filibusteros procedente del
Realejo al mando de Walker, quien luego en la Virgen se apodero del vapor la
“Virgen” y el 13 de octubre ataca y toma Granada. En 1856 es escenario de la
retirada del ejército Costarricense diezmado por el cólera después de la
batalla del 11 de abril en Rivas. El 23 de de Noviembre del mismo año es
escenario de la batalla naval entre la goleta “Granada” de William Walker y el
bergantín Costarricense “Once de Abril”. Y el 5 de mayo 1857 es escenario de la
retirada final de Walker en la corbeta de guerra Americana “Santa María”. Tras
su capitulación en Rivas el 1 de mayo. El 3 de Septiembre el Capitán Novell lo
entrega a las autoridades de Trujillo, Honduras donde William Walker es
fusilado el 12 de septiembre de este mismo año, por no haber querido renunciar
a su autonombramiento como presidente de Nicaragua.
El telégrafo en San Juan del
Sur
San Juan del Sur ha sido un
importante centro de comunicación. El 16 de marzo de 1875, se inicia el tendido
telegráfico de San Juan del Sur a Corinto inaugurándose el 30 de Marzo del año
siguiente durante el Gobierno de don Pedro Joaquín Chamorro Alfaro. En 1882 se
abrió una puerta de Nicaragua al mundo con la instalación de un cable submarino
cuyo servicio era administrado por la All American Cable, el cual se mantuvo
hasta la década de 1960.
Mapa hecho en mano de la
ubicación del cable
1882
En marzo de 1928, durante la
administración de José María Moncada, se inauguro la red ferroviaria entre San
Jorge y San Juan del Sur, se establecía comunicación con el interior del país
por medio del vapor Victoria que hacia su travesía entre San Jorge y Granada.
Estación del Ferrocarril
Pareja junto al Ferrocarril
Ferrocarril pasando el puente
del estero de San Juan del Sur 1929.
Ferrocarril pasando frente Hotel Estrella
Hotel Estrella, se observan en
frente los rieles.
En el año 1884 el poeta Rubén
Darío, orgullo de Nicaragua siendo secretario personal del entonces Presidente
de la Republica el Rivense Dr. Adán Cárdenas, visito la ciudad y estuvo en la
residencia de William Cross quien era el administrador de la estación del cable,
la casa de Cross es el actual hotel Victoriano de San Juan del sur y publica
que aquí en San Juan del Sur conoció a los mejores Ingleses que en su vida
había visto.
San Juan del Sur recibió una
gran oleada de extranjeros que llegaron por la ruta del tránsito para trabajar
en la compañía de cable, muchos de ellos eran americanos, ingleses, alemanes y
algunos de ellos dejaron huella histórica, cultural y social.
Calle principal de San Juan
del Sur
Los Marines EE: UU en San Juan
del sur
1927
1927
Para los años 1934, San Juan
del Sur seguía siendo un pueblo de pescadores, sus calles todavía no estaban adoquinadas,
todavía se podía ver muy pocas casas señoriales en el Municipio, sus casas eran
la mayoría de maderas. En la zona central en donde hoy es el sindicato hasta
dar con el centro de Salud, era la plaza el Albinal una gran extensión de
tierra en donde las aguas del mar entraban formándose así un terreno pantanoso
habitad de cangrejos y conchas negras, una gran montaña de mangles, que con el
tiempo y despale se fue rellenando hasta formar una gran plaza que primeramente
se ocupo como campo deportivo.
Todas las mañanas las carretas
haladas por bueyes llegaban a la ciudad con productos que cosechaban en sus
parcelas y que eran necesario en la vida diaria de los pobladores sanjuaneños,
ellos abastecían de leña, carbón, guineos, yucas, verduras, frutas, leche,
cuajadas, granos y hasta carnes, estas carretas y caballos llegaban de fincas
de las comunidades aledañas como Carrizal, Toro Venado, Tortuga y Ostional.
Habían pocos vehículos la
gente paseaba a pies o en bicicletas por las calles polvorientas del puerto
mientras escuchan rechinar los molinos de vientos en las casas de la ciudad, la
mayoría de casas tenían su propio pozo para el abastecimiento del agua potable.
Fiestas Patronales
El pueblo de San Juan del Sur
celebra dos fiestas patronales:
- El 24 de junio la fiesta en
honor a San Juan Bautista,
Imagen de San Juan Bautista
Santo Patrono
- El 16 de julio las fiestas
patronales de los pescadores en honor a la Virgen del Carmen en una singular
procesión por el mar con barcos y lanchas engalanados.
Imagen de la virgen del Carmen
patrona de los pescadores
San Juan del sur
Y En la comunidad Ostional se
Celebra la fiesta de San José Obrero.
La iglesia de San Juan
Bautista, se encuentra registrada como Parroquia en los libros de registro de
la diócesis de Granada con la fecha 2 de agosto de 1887, fue su primer cura
Juan Raymundo Ponce, para ese entonces esta Parroquia se extendía desde Tola
hasta la Cruz Costa Rica, que para esa fecha este era parte del territorio de
Nicaragua, reconstruida usando la misma madera del diseño original sus techos
eran de tejas no tenia torre ni campanario, esta era administrada por Frailes
Franciscanos, fue hasta hace pocos años que se construyo su torre, El Templo
Parroquial construido por el Padre Manuel Castillo, oriundo de Matagalpa.
Iglesia San Juan Bautista
El templo es pequeño y
presenta un frontispicio de piedra y cemento, sencillo pero elegante, gracias a
la labor progresista del entonces padre español Gualtero del Campo, fallecido
en el año de 1964. La cuadra del parque era una gran arboleda en donde la gente
sombreaba de sus frescuras.
La imagen de San Juan Bautista
(San Juancito) fue traído de España por sus curas, este recorría las pulperías
con una alcancía en donde recogía su limosna para su celebración, las fiestas
taurinas se hacían en la plaza del albinal exactamente en donde es hoy la
esquina opuesta al batallón, fue hasta que los señores Marcos Cascante dio
hacer la imagen grande de San Juan Bautista, a un santero de apellido Galdaba
que hacia imágenes en el barrio la puebla de Rivas.
EL CABOTAJE
San Juan del Sur en 1940 fue
un puerto de mucha importancia, tanto para toda clase de importaciones para el
país, como para las exportaciones de que se hacían de productos de nuestra
tierra.
En este puerto se
desembarcaban desde un vehículo, hasta los productos más menudo y los más
necesario para la alimentación; desde harina, avena, chicles, galletas,
materiales de construcción, hierro, zinc, alambre de púas, grapas,
insecticidas, abono, papel de periódico, tinta, sebo, soda caustica para
fabricar jabón, en fin todo, asi como también fue puerto para los pasajeros que
viajaban o ingresaban al interior del país.
Descargue de barcos
Pasajeros y ganado, sacos y
tucas de maderas eran trasladadas del muelle a los lanchones halados por
remolcadores que llegaban al barco donde eran izados en chinchillos ( redes con
plataforma) por las grúas de los barcos y en algunos casos hasta los pasajeros
cuando el mar estaba agitado. Siempre se practicaba este mismo sistema para
todos los productos de exportación: cacao, ganado en pie, pacas y semillas de
algodón, sacos de café, azúcar, ajonjolí, barriles de bálsamo procedente del
Perú, maderas para tinte y preciosa que eran haladas en balsa hasta el barco e
izadas a bordo, sujetadas por enorme ganchos de donde eran tomados por las
grúas.
Según pobladores que hoy en
día están jubilado gracias al sudor que brotaron descargando esos barcos nos
cuentan, que era algo divertido observar los montones de tucas de maderas que
se encontraban flotando en la bahía, algunos jóvenes de la época jugaban
pasándose de una a otra o haciéndose clavados, recuerdan con mucha nostalgia la
arreada del ganado que se embarcaban para ser llevado a otros países, en una
ocasión una res que cayó al agua fue comido por un tiburón que vivía en la
bahía esperando que algo cayera para devorarlo.
Era lindo ver el movimiento de
la gran cantidad de obreros que trabajaban, tanto hombres como mujeres, en las
calles las filas de rastras y camiones que invadía el puerto para parquearse y
esperar su turno, a veces hasta 5 barcos estaban anclados esperando turno de
descargue.
En la entrada al muelle se
podía ver una gran cantidad de bicicletas que aseguraban con candados esperando
silenciosamente a su dueños, las fresqueras con su balde repartían el fresco
que cobraba el día de pago, a las mujeres que eran la mayoría, las encargadas
de llevar el control de entrada y salida, se le conocía como “Cheques” de la
palabra chequeadora, las monta cargas se miraban venir de un lado a otro con
productos, día y noche el muelle se activaba y generaba ingresos a muchos
Sanjuaneños, nos dábamos el gusto de ir a buscar mano de obra a otros lugares
porque ya aquí no daba abasto, en fin todo lo que entra y sale actualmente por
el puerto de Corinto y puerto Sandino salía y entraba por San Juan del Sur.
SALIDA DE LA GUARDIA NACIONAL
La casona y tres casas que
fueron parte de las infraestructuras que se construyeron, para la estación de
la compañía del cable, fueron propiedades de la Familia Somoza Porto Carrero,
disfrutando así de la comodidad y confort que una familia adinerada tuviera en
esa época, venían a pasar días escoltados por los miembros de la Guardia
Nacional.
El 18 de Junio de 1979 después
de la lucha armada del pueblo de Nicaragua contra la dictadura de 40 años de
los Somoza, San Juan del Sur es escenario de la salida de la Guardia Nacional a
otros países de centro América como el Salvador y Honduras, exigieron a los
dueños de embarcaciones a que los llevaran a salvo de lo contrario los
matarían.
El día 1 de septiembre del año
1992, San Juan del Sur enfrenta una gran catástrofe natural como es un maremoto
que fue provocado por un terremoto de 7,2 y 7,8 grados en la escala de Richter,
destrozando así todos los negocios ubicados en la línea de la bahía, con
fuertes olas que avanzaron hasta 100 metros en las calles de la ciudad, dejando
grandes pérdidas materiales y pocas humanas.
San Juan del Sur se ha ido
convirtiendo en uno de los lugares de mayor movimiento turístico del país. Este
cambio fundamental tuvo su inicio con la llegada de los barcos de cruceros en
1999 como resultado de los esfuerzos de la empresa privada. El puerto de San
Juan del Sur estaba en abandono y con planes inmediatos de retirar la poca
maquinaria que quedaba para ser trasladada a Puerto Sandino y Puerto Corinto.
Las únicas operaciones eran las de pesca artesanal y ocasionalmente algunos
botes particulares de pesca deportiva.
En los últimos tres o cuatro
años se ha experimentado un acelerado crecimiento en el comercio y servicios
turísticos en San Juan del Sur. Muchos nuevos locales se han abierto,
contrastando con el ambiente económico deprimido que había en el puerto antes
de 1999.
El 24 de octubre del año 2002
el Gobierno Municipal de San Juan del Sur declara al puerto como ciudad “Puerto
Turístico de Nicaragua” siendo este el primero en el país, contando con 56.5 km
de costas y más de 40 playas de diferentes características que define el
municipio como uno de los destinos turísticos más importante de Nicaragua.
En el 2012, San Juan del Sur
cumple su 160 aniversario de haber sido elevada Ciudad. Aquí, la pesca todavía
persiste, pero muchos de sus habitantes han optado por invertir su dinero en el
flujo constante de visitantes extranjeros. Muchas familias han iniciado en sus
propias casas, hospedajes, cybers, bares, surf camps, shuttle service,
lavanderías, etc., porque el surf está creciendo y la inversión extranjera.
En el Municipio de San Juan
del Sur se conserva nuestra identidad contando con diversos sectores sociales y
económicos competitivos comprometidos con su desarrollo integral y sostenible,
con una eficiente organización e infraestructura adecuada implementando
procesos de planificación participativa como resultado del trabajo en equipo
sustentado en el colectivismo, la solidaridad, respeto, tolerancia y equidad,
conscientes que la salud, la educación y la formación de sus habitantes son la
base del desarrollo en correspondencia con el cuido y preservación del medio
ambiente.